Revisemos bíblicamente este maravilloso concepto que tiene poder eficaz para cambiar la vida del ser humano en abundancia de justicia, paz y prosperidad.
1Juan 4:16 "Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor. Y el que permanece en el amor permanece en Dios, y Dios permanece en él".En esta lectura podemos comprender que el origen del amor es Dios, por tanto todo aquel que se declare ser practicante del amor es porque permanece en Dios y Dios en él.
Esta permanencia de Dios sobre el hombre reposa en el corazón; por lo cual, para poder amar, verdaderamente, necesitamos ser llenos de este amor, ¿cómo se adquiere?, leamos:
Romanos 5:5 "...porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos ha sido dado".
Es entonces el Espíritu Santo el que puede dotar de amor al ser humano y transformarlo en lo más preciado: Isaías 13:12 "Haré al ser humano más preciado que el oro fino, y al hombre más que el oro de Ofir". Para entender más, revisemos la siguiente lectura:
Ezequiel 36:25-27 "Entonces esparciré sobre vosotros agua pura, y seréis purificados de todas vuestras impurezas...Os daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de vosotros...Pondré mi Espíritu dentro de vosotros y haré que andéis según mis leyes, que guardéis mis decretos y los pongáis por obra".
Esta cita bíblica, nos amplía más la comprensión de cómo obra el amor de Dios cuando se derrama sobre nosotros: nos hace un nuevo hombre dispuesto a caminar en sus sagradas leyes que se derivan del Decálogo Universal(Los Diez Mandamientos), enseñándonos a interactuar en armonía con las leyes de su creación. Empieza el ser humano a valorarse y valorar correctamente su entorno buscando siempre una actuación sostenible (Deuteronomio 4:40 "Guarda sus leyes y sus mandamientos que yo te mando hoy, para que te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti, y para que prolongues los días sobre la tierra que Jehovah tu Dios te da para siempre"), definiéndose así lo que es el amor, y que se reafirma textualmente en:
2Juan 6 "Y este es el amor: que andemos según sus mandamientos. Este es el mandamiento que habéis de andar, como habéis oído desde el principio" ¿Y que fue oído desde el principio?, leamos la respuesta:
1 Juan 2:7 "Amados, no os escribo un mandamiento nuevo sino el mandamiento antiguo que teníais desde el principio. El mandamiento antiguo es la palabra que habéis oído".
Por tanto, la práctica de los mandamientos antiguos dados por Dios con la virtud del Espíritu Santo es la manifestación del amor.
Efesios 3:19 "Pido, pues, que conozcan ese amor, que es mucho más grande que todo cuanto podemos conocer, para que así estén completamente llenos de Dios".
Efesios 3:17,18 "...Así ustedes, firmes y con raíces profundas en el amor, podrán comprender con todos los creyentes cuan ancho, largo, profundo y alto es el amor de Cristo".
2 Tesalonicenses 3:5 "¡El Señor dirija vuestros corazones hacia el amor de Dios y la paciencia de Cristo!"
Efesios 4:15,16 "sino que, siguiendo la verdad con amor, crezcamos en todo hacia aquel que es la cabeza: Cristo. De parte de él todo el cuerpo, bien concertado y entrelazado por la cohesión que aportan todos los ligamentos, recibe su crecimiento de acuerdo con la actividad proporcionada a cada uno de los miembros, para ir edificándose en amor".
Es un mensaje muy hermoso y profundo, en el que Dios nos invita a crecer en toda nuestra capacidad y habilidad que el nos da a cada uno en forma diferente pero que se complementan para fortalecer la Obra Magnífica de nuestro Bendito Dios Jehovah, cuyo nombre fue, es y será eminentemente glorioso sobre toda gloria. Amén. El cuerpo de Cristo, que es la iglesia del Señor tiene que estar bien concertado y entrelazado, esta cohesión es muy imprescindible para crecer edificados en ese amor sólido que nos enseña Dios a través de sus dichos y hechos que dan testimonio continuo por la eternidad. Amén 1 Juan 4:7 "Amados, amémonos unos a otros, porque el amor es de Dios. Y todo aquel que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios. El que no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es amor".
De todo lo que venimos estudiando, observamos como esta palabra "amor" implica una relación armoniosa con Dios y nuestro prójimo, por lo que la falta de práctica en uno de ellos conlleva a una falsa visión de lo que es el amor y vivir dentro de lo que bíblicamente sería "amor fingido", veamos:
Mateo 22:37-40 "Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente. Este es el grande y el primer mandamiento. Y el segundo es semejante a él: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos dependen toda la Ley y Los Profetas"
Romanos 12:9 "El amor sea sin fingimiento, aborreciendo lo malo y adhiriéndonos a lo bueno" El amor verdadero se fundamenta en lo bueno, que es: "De manera que la ley ciertamente es santa; y el mandamiento es santo, justo y bueno" Romanos 7:12
El desconocimiento de Dios, repercute en la desvalorización de la Ley de Dios, y por tanto en el establecimiento de una forma de vida superficial que solamente genera consecuencias desagradables que que hoy por hoy se vive en la actualidad.
Salmos 14:1 "Dijo el necio en su corazón: ‘No hay Dios’. Se han corrompido; han hecho cosas abominables. No hay quien haga el bien".
La forma de vida sin Dios conlleva a la corrupción, a la violencia,la maldad, terminando en lo que terminará peor que Sodoma y Gomorra, confundiendo la libertad con libertinaje.
Gracias a este amor que nos define e instruye El Omnipotente, vivimos dentro de la Libertad, la cual no daña a nadie:
Santiago 1:25 "Pero el que presta atención a la perfecta ley de la libertad y que persevera en ella, sin ser oidor olvidadizo sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace"
1Corintios 13:8 "El amor jamás dejará de existir. Un día los hombres dejarán de profetizar, y ya no hablarán en lenguas, ni serán necesarios los conocimientos".
Judas 1:21 "conservaos en el amor de Dios, aguardando con esperanza la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para vida eterna"